
Julio Valente proyectó subas de 1,5% mensual en los precios inmobiliarios y advirtió sobre el exceso de stock
El director académico de CRS Argentina y Uruguay, Julio Valente, pasó por el streaming de Ladrillo.Info para analizar la situación del mercado, los desafíos en la formación profesional y la diferencia histórica entre propiedades nuevas y usadas.
Durante la entrevista que puede seguirse por Youtube, ofreció una visión crítica sobre el modelo actual, defendió la necesidad de una desregulación que elimine barreras innecesarias y compartió su experiencia de más de dos décadas en la capacitación de agentes y corredores.
A lo largo del mano a mano, Valente sostuvo que el mercado local vive un cambio profundo, pero que todavía arrastra hábitos que lo alejan de modelos más avanzados. Diferenció entre la lógica transaccional, centrada en el producto, y la relacional, que prioriza a las personas. “Hay inmobiliarias modernas con un método transaccional y otras más antiguas con un enfoque relacional. No depende de la antigüedad, sino de la forma de pensar”, explicó.
El formador sostuvo que muchos agentes carecen de disciplina para mantener el contacto regular con el cliente, lo que genera desconfianza. “Cuando ponen una propiedad en venta, el corredor desaparece. El propietario siente que su inmueble está encajonado. Es fundamental llamar todas las semanas para informar sobre la situación”, señaló. Esa actitud, para Valente, forma parte de un problema estructural del sector, donde el servicio es intangible y el corredor debe aprender a hacerlo visible. “El testimonio de los clientes es una forma de tangibilizarlo. Hay que demostrar valor”, afirmó.
Valente remarcó que la clave del éxito para un agente inmobiliario pasa por entender la diferencia entre captar y vender. “El proceso más difícil es la captación. Mostrar propiedades es más sencillo, pero captar exige orden y compromiso. Muchas inmobiliarias hoy no tienen producto para vender porque descuidaron esa parte”, dijo.
Cuestión de precios
En ese contexto, repasó el impacto de la crisis económica en la actividad. Explicó que desde mediados de 2018 hasta el año pasado el mercado fue de compradores, con precios en baja y acumulación de stock. “El valor de las propiedades bajó 30% o hasta 50% en algunos casos. El blanqueo de capitales y el regreso del crédito hipotecario cambiaron el escenario”, destacó. Según detalló, en marzo el 27% de las operaciones en la Ciudad de Buenos Aires se hicieron con financiamiento. “El precio se está deslizando entre 1% y 1,5% mensual. No espero saltos abruptos, pero va a subir en la medida en que se reduzca el stock”, añadió.
Respecto del precio del metro cuadrado, subrayó que existe una brecha histórica entre propiedades usadas y nuevas. “En Almagro un departamento usado en buenas condiciones cuesta 2000 dólares el metro cuadrado, mientras que uno nuevo está en 3000 o más. Esa diferencia no se había visto antes”, describió. Para Valente, esa distorsión se corregirá con el tiempo, pero por ahora complica las ventas en pozo. “Se vendía en pozo con la promesa de un 15% o 20% de ahorro. Hoy hay departamentos terminados al mismo precio o incluso más baratos. Vender en pozo es vender una promesa, y no todos cumplen”, advirtió.
Franquicias: ¿sí o no?
Consultado sobre la situación de las franquicias inmobiliarias y su relación con los colegios profesionales, Valente fue directo. Contó su experiencia personal como docente en el colegio de la Ciudad de Buenos Aires, del que lo apartaron por considerarlo “reclutador de Remax”, aunque negó haber trabajado allí. “Doy clases en las oficinas que me convocan, pero jamás trabajé para Remax. Hay una estigmatización contra el modelo de franquicias, como si fuera un virus que contagia ideas distintas”, relató.
Criticó con dureza el rol de los colegios en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires, a los que acusó de haber olvidado a sus propios matriculados en su lucha contra las franquicias. “Se enfocaron en exterminar a una marca en lugar de ayudar a los colegiados. En su afán de poder perdieron de vista su objetivo”, cuestionó.
Inicios y enseñanza
Sobre su trayectoria en la formación de corredores y agentes inmobiliarios, Valente recordó que comenzó tras la crisis de 2001, cuando la caída de su empresa lo llevó a buscar un nuevo rumbo. Se incorporó como profesor en la Universidad Tecnológica Nacional en una carrera recién creada para la matriculación profesional. “En los primeros años, el aula era doble. Yo enseñaba, pero también aprendía mucho de alumnos con experiencia”, comentó.
A partir de esa experiencia, desarrolló el curso RIP (Real Estate Advanced Practice), que hoy dirige. “Firmé un convenio en 2018 para traer este curso. Lo hicieron 2000 personas. Puede parecer poco frente a un universo de 50.000 entre agentes y matriculados, pero quienes lo cursaron notan la diferencia. Es un antes y un después”, aseguró.
Valente cerró la entrevista con un consejo breve pero contundente para los profesionales del sector: “Captá solo lo que vas a vender. Lo que no vas a vender no lo captes. Es así de simple”. Para él, esa consigna resume una filosofía de trabajo centrada en la honestidad y la eficiencia. “El negocio fácil es el que vale la pena”, concluyó.
Fuente: Ladrillo
 
					

